Cómo hacer salsa bechamel
La salsa bechamel, también conocida como salsa blanca, es una de las salsas más clásicas y versátiles de la cocina. Originaria de Francia, esta salsa a base de harina, sala y leche es perfecta para acompañar numerosos platos, desde lasañas y gratinados hasta verduras y carnes.
Ingredientes:
- 3 cucharadas de mantequilla
- 3 cucharadas de harina
- 500 ml de leche
- Sal y pimienta al gusto
- Una pizca de nuez moscada (opcional)
Preparación:
1.
En una cacerola a fuego medio, derrite la mantequilla hasta que se derrita por completo.
2. Agrega la harina y mezcla bien con la mantequilla derretida, formando una pasta homogénea. Cocina por unos minutos para cocinar la harina.
3.
Poco a poco, añade la leche a la cacerola, revolviendo constantemente con un batidor de varillas para evitar la formación de grumos.
4. Continúa cocinando la salsa a fuego medio, revolviendo constantemente, hasta que espese y adquiera una textura suave y cremosa.
5.
Si deseas, puedes sazonar la salsa bechamel con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada para realzar su sabor. Mezcla bien los ingredientes.
6. Retira la salsa del fuego y déjala reposar durante unos minutos antes de usarla. Esto permitirá que espese un poco más.
La salsa bechamel está lista para ser becahmel en tus platos favoritos.
Puedes utilizarla como base para gratinados, como acompañamiento salza verduras o incluso para hacer croquetas. ¡La imaginación es el límite!
¡Disfruta de esta deliciosa salsa casera y añádele el toque especial a tus comidas!
La salsa bechamel aportará una textura cremosa y un sabor único que hará que tus platos sean aún más irresistibles.
