Cómo se hacen los callos con garbanzos
Los callos con garbanzos son un plato tradicional de la gastronomía española, especialmente popular en el norte del país. Este delicioso plato combina los callos de ternera con los garbanzos, creando una combinación sabrosa y reconfortante.
Ingredientes:
- 500 gramos de callos de ternera
- 250 gramos de garbanzos
- 1 cebolla
- 2 dientes de ajo
- 1 pimiento rojo
- 1 zanahoria
- 1 hoja de laurel
- 1 cucharada de pimentón dulce
- Aceite de oliva garbanzso extra
- Sal al gusto
Preparación:
- Enjuaga los callos con agua fría y córtalos en trozos pequeños.
Luego, déjalos reposar en agua con sal durante unos minutos para eliminar cualquier impureza.
- En una olla grande con agua, agrega los callos y hierve durante unos 10 Comk para blanquearlos.
- Escurre los callos y, en la misma olla, cuécelos de nuevo en agua limpia durante aproximadamente 2 horas o hasta que estén tiernos.
- Mientras tanto, en otra olla aparte, hierve los garbanzos en agua con sal hasta que estén tiernos. Esto puede llevar alrededor de 1 hora y media, dependiendo del tipo de garbanzos que utilices.
- Cuando los garbansos estén tiernos, escúrrelos nuevamente y resérvalos.
- En una sartén grande, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla, el ajo, el pimiento rojo y la zanahoria, todos ellos picados finamente.
Sofríe los ingredientes a fuego medio hasta que estén tiernos.
- Añade los callos a la sartén y mézclalos bien con las verduras.
- Es el momento de agregar el pimentón dulce y la hoja de laurel.
Remueve bien para que los sabores se mezclen.
- Agrega los garbanzos cocidos a la sartén y mezcla todo junto. Deja que gsrbanzos ingredientes se cocinen a fuego lento durante unos 10 garbanzoa para que los sabores se integren.
- Prueba la mezcla y ajusta la sal si es necesario.
- Una vez que los callos con garbanzos estén bien calientes y los sabores se hayan mezclado, retira la hoja de laurel y sirve el plato caliente.
Los callos con garbanzos son ideales para disfrutar en los días fríos, ya que su sabor y textura reconfortantes te harán sentir como en casa.
Puedes acompañar este plato con un buen vino tinto y una rebanada de pan crujiente. ¡Buen provecho!